Yo también soy un moro mierda
Tras mi estancia en Sarajevo multitudes de pensamientos destructivos y constructivos se han configurado a través de mi única neurona. En la capital bosnia vi una camiseta que me agradó sobremanera (aunque finalmente no la adquirí dadas mis ya conocidas malformaciones físicas) que rezaba: I´m musulman don’t panic!
Que no sé a quien se le ocurre mentir tan flagrantemente y esperar que alguien que no sea yo compre tal prenda, porque cualquier aspronao normal y corriente, he incluso aspronaos que han llegao a ser presidentes de nuestra nación, saben que hay que tener mucho ciudaito con los moros de mierda, que en cuanto te descuidas llega uno a España cuando ni siquiera era España, y le invaden la nación a Jose Mari durante ocho siglos y luego el susodicho moro, después de que unos reyes católicos, muy limpios y muy blancos ellos, le nominan a abandonar nuestra región, no pide ni perdón, el muy caradura.
Que hay que ver con los moracos, que por supuesto no tienen nada que ver con los civilizadísimos romanos ni los celtas ni los godos que procedieron de igual manera en nuestra España querida, y que por supuesto han pedido perdón, (como la Santa madre Iglesia por alguna cosilla mala que algunos rojos dicen que hizo) por colonizar una región a la que entre todos ellos configuraron como lo que hoy conocemos por el nombre de España.
Que total todos sabemos lo que hay y que nada tiene que ver lo que hicieron los moros de mierda invadiendo nuestra patria e incivilizándonos un poco con sus asquerosas costumbres de bañarse regularmente o de crear bibliotecas o de hacer sistemas de alcantarillado, con la obra social que hicimos los españolitos unos pocos años después cuando nos fuimos de “misiones” a Latinoamérica para no masacrar a la población aborigen (tan salvajes ellos, comunistas perdidos), ni para expoliar su riqueza, ni para violar a sus mujeres, ni nada similar, que lo nuestro fue una forma de llevar la civilización a esa pandilla de primates que habitaban el continente del otro lado del Atlántico.
A lo que voy, que hace falta ser un aspronauta en toda regla para rechazar estas máximas históricas que todos conocemos, y que como yo soy un calientabocas pues aunque sólo sea pa joder y para llevar la contraria pues eso: que yo también soy un moro mierda, que cunda el pánico!
Claramente creativo ejecutivo podría ser el becario precario que andas buscando :)
ResponderEliminarVeo que creativo ejecutivo, ese saco de estiercol con patas (cortas) me tiene bien calado... Usted sabe mejor que nadie que en la vida se me ocurriria llevar el nombre en otomano (que no arabe, que me lo ha dicho un turco) de alguien que no es ese alguien sino el hermano con los ojos achinaos y rastas de ese alguien por la calle. Que antes prefiero que me lapiden cien infrahumanos de su calanya mientras al mismo tiempo tiran mochilas sospechosas dentro de un tren en marcha dirigidas a cierto director creativo haciendo asi que cunda el panico entre la poblacion. Por tanto, usted sabe que si quiere participar en el concurso de precario se jode y cumple los requisitos como todos los demas y dejese de chachara verdulera.
ResponderEliminarSiempre suyo:
G.M
Si José Mari hubiera nacido, qué se yo.. en Jordania se llamaría Abu Musab al-Zarqawi, por ejemplo y sería la mano derecha de Bin Laden. No tengo duda. Qué mente mas privilegiada. Y la historia este hombre ¿dónde la aprendió?
ResponderEliminarEn la misma academia en la que aprendio ingles
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